La batalla

Cuando hayas logrado levantarte una y otra vez, con sangre en las rodillas, con sudor en la frente y raspones en los codos. Cuando después de una semana, hayas conseguido no dar tu brazo a torcer, no caerte, saber dominar a la bestia y moverte con independencia y libertad por donde deseas. Cuando hayas logrado…

La Justiciera

Esa soy yo, cuando me pongo, la Justiciera. Hay cosas que me hierven la sangre y me hacen ponerme mi antifaz de la Justiciera. Una de ellas es que aparquen en la puerta de mi casa, zona de residentes, sin poner el ticket de la ORA. Os cuento mi última incursión de heroína histérica (la histeria canalizada…